El Ordenamiento territorial es la herramienta de planeación que contribuye a la mejora de la calidad la vida de la población, recuperando, manteniendo e incrementando el capital natural disponible. De acuerdo con el marco normativo vigente en los Estados Unidos Mexicanos y el estado de Morelos, su aplicación se rige por dos marcos jurídicos sectoriales, el urbano (asentamientos humanos) y el ambiental (ecosistemas, biodiversidad y servicios ambientales):

  • La Ley General del Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente (LGEEPA) y la Ley Estatal del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente del Estado de Morelos (LEEPAMOR), conciben al Ordenamiento Ecológico como “Instrumento de la política ambiental encaminado a regular o inducir el uso del suelo y las actividades productivas, con el fin de lograr la protección del medio ambiente, la preservación y el aprovechamiento sustentable de los recursos naturales, a partir del análisis de las tendencias de deterioro y las potencialidades de aprovechamiento de los mismos.”

  • La Ley General de Asentamientos Humanos (LGAH) y la Ley de Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano Sustentable del Estado de Morelos (LOTDUS) coloca al ordenamiento territorial como una política sectorial en el marco del sistema nacional de planeación democrática, entendido como el proceso de distribución equilibrada y sustentable de la población y de las actividades económicas en el territorio; que pretende contribuir a mejorar el nivel y calidad de vida de la población urbana y rural.

Como instrumento de planeación, el ordenamiento territorial se concreta en planes o programas, que expresan el modelo territorial de largo plazo que la sociedad percibe como deseable, así como las estrategias mediante las cuales se actuará sobre la realidad para evolucionar hacia dicho modelo. El plan o programa de ordenamiento territorial es el instrumento básico donde se desarrolla el modelo territorial deseable; en él se expresan los objetivos, políticas, estrategias, metas, lineamientos, programas, acciones y normas que guiarán el uso y la ocupación, presente y futura, del territorio.